
Según un estudio realizado en la Universidad de Derby, el consumo excesivo de té de mala calidad (el que viene envasado en saquitos y bolsitas, para ellos se utilizan las hojas mas maduras y viejas que son las que acumulan mas flúor y principalmente el más barato de ellos) puede llegar a ser perjudicial para los dientes y los huesos, debido a su excesivo contenido de flúor, también hay dudas si son peligrosas para la salud algunas de las bolsas de té que están hechas de una variedad de plásticos, incluyendo el nylon, algunas están hechas de rayón viscosa y otras están hechas de termoplástico, PVC o polipropileno , que al calentar en el agua liberen sustancias químicas.
Hay que comprobar que las bolsas de té no contengan epiclorhidrina, un compuesto que es utilizado principalmente para la producción de resinas epoxi. Considerado un carcinógeno potencial por el Instituto Nacional para la Seguridad y Salud Ocupacional2 (NIOSH), la epiclorhidrina también es utilizada como pesticida.
La mejor opción sería comprar el te a granel si puede ser orgánico libre de pesticidas, y prepararlo nosotros o que fuera de un cultivo de ambiente limpio (el té es conocido por acumular fluoruro, metales pesados y otras toxinas del suelo y del agua, por lo que un ambiente de crecimiento limpio es esencial para producir té puro, de alta calidad.
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